domingo, 8 de agosto de 2010

Me rindo.

¿Qué lo gatilló?
Si; esa debería ser la respuesta a buscar.
Supongo que se me juntó todo... todo lo que siempre esquivé; lo que no quise ver, ni tener.


Me permití tener pena. 
Me permití estar triste y asumirlo.
Me dí licencia para tener, desear, y sufrir por un amor imposible.
Se me corrompió aquello más grande que he tenido: la amistad.
Asumí que tengo un trauma y miedos; que soy débil de sentimientos... y que ya no puedo más.


El positivismo se me vino al suelo; si bien como dice La Jhanna : "es una cosa de actitud...".  Creo, que no tengo ganas de tener ya más actitud, no ahora por lo menos.
No quiero creer que todo se puede, que todo lo puedo, que todo va a pasar. La hueva' es así :  No me tengo confianza; no soy ni me siento linda; no quiero ser la más brillante de todas; mi familia no está, ni estará; mi viejo no es mi viejo, y además no me quiere; no creo en ningún tipo de amor absoluto; la gente me resulta tonta y superficial; el carrete me aburre; y, estúpidamente, me siento prendada de un hombre que no me pertenece, y no lo hará jamás tampoco.


¿Has sentido alguna vez que quieres morir?.
Soy cobarde... o no he tenido cómo.
Si existiera una pastilla que al tomarla me desapareciera, y la hubiera tenido a mano... Sin lugar a dudas, ya la habría ingerido. Pero, quizás aún soy muy cobarde para intentar otro método.
Le perdí el sentido a seguir viviendo... o quizás nunca se lo encontré.
He llegado hasta a pensar que me estoy volviendo loca; o que pienso y analizo mucho más que el resto de los mortales. No sé...

No creo en el amor absoluto de ninguna índole.  Mi familia ama a medias, mis amigos tienen un amor propio más grande que el que sienten por las demás personas ( ... y quizás, eso está bien...), y no habrá jamás de nuevo un hombre al que yo ame tanto y me ame a mí como ya me amaron.

La gente que tiene porqué vivir, sabe como hacerlo.  Cuando tus ideales, metas, y sueños son tan claros; creo que se tienen todas las armas para seguir en pie. Yo ya no sé para qué sigo con vida...



- Por tí, hazlo por tí... esa es tu razón de vivir.


¿ Y si yo ya no me siento un motivo suficiente y único, como para ser lo que me motive a seguir?.
Siempre le he temido al fracaso. Pero, creo que el fracaso más grande que puedo experimentar en la vida es el que siento ahora: perder el sentido para seguir de pie... con vida.


No sé si la solución está en "encontrar nuevos y mejores rumbos"... pasiones que me motiven y me den fuerzas. El mundo se sigue moviendo; nadie aguardará por mí hasta que ya tengo un nuevo norte e ilusiones.  Tengo ya veintidós años; no es posible que me encuentre recién ahora tan desorientada, ¿o si?.


Me siento de manos atadas.
Las posibilidades no están al alcance de mis dedos. Ya no quiero ser el orgullo familiar, ni cargar con responsabilidades ajenas.
Si, quizás me equivoqué de camino nuevamente, o quizás... simplemente, no estoy hecha, ni armada para caminar hacia ningún lado.


Soy cobarde, nostálgica, hipersensible emocional. Me siento sola, y no quiero estarlo.

 ¿Para qué soy buena?, ¿ A quién le hago falta?.
 No me agrada como marcha todo; no me gusta cómo y lo que estoy viviendo.
No me siento cómoda con gente que sólo vive para sacar su título y cubrir las expectativas idealizadas del común de la sociedad;  ni me gusta rodearme de gente estúpida que sólo vive para carretear.
(En este preciso instante, me pregunto si es todo ésto lo que habrá pensado El Diego alguna vez...).


Siempre he reprochado a quienes inspiran lástima; cargan penas y las demuestran a menudo. Me parecen seres mediocres, victimizados sólo por comodidad.

Pero, hoy tengo pena y quiero vivirla. Necesito de la licencia para poder asumir que me siento triste y derrotada; que ya no creo ni quiero seguir luchando... simplemente, porque se me perdió el motivo.   Porque quizás, no me parece válido seguir arriba de un tren que tiene un recorrido en masas, pero que me lleva  a un final que no sé si es el destino que quise. No me hace sentir ni útil, ni plena.



 No tengo hijos, no tengo un amor de pareja... ya ni siquiera siento que debo cumplir con otorgarle orgullo a mi familia y / o amigos; porque ellos tampoco se ocupan de provocármelo a mi.
De hecho, últimamente he sentido que casi se esmeran en hacerme pensar que cada uno sólo debe vivir por sí mismo y ya.
¡Yo no puedo!.
No me amo tanto como para creer que soy mi único motivo.
No quiero luchar para obtener logros que voy a festejar y disfrutar sola.


 Inicialmente, creía que era flojera.  Que me quedaba paralizada por cansancio; hoy no.
 Me dí cuenta que las ganas deben venir de tus entrañas; la motivación es, sin cabida a cuestionamiento alguno, la fuerza de tus actos.  No la tengo, y es por lo cual he perdido el flujo y la ansiedad de vida.

Siento que el amor no es lo más esencial... para el resto.
El maldito poder económico corrompe todo; es , lejos, la mejor de las armas para vivir de la manera que más se acerque a nuestros anhelos. Y yo no lo tengo, y no tengo como hacerme de él... rápidamente, para poder encontrar la motivación antes de rendirme del todo.


No quiero que se me pase la vida mientras busco el cómo vivir.
¿De qué vida me hablan si estoy muerta en vida?.


Ya no me agradan las fiestas intrínsecamente;  salgo y comparto sólo para dejar de pensar en todo este tipo de cosas.   No hay nada que aborresca más que encontrarme y tener que dar el saludo a gente que no me interesa; personas vacías que no se cansan  de "sobrevivir", de aparentar, de vivir de tal modo sólo porque es un bien legitimizado por la sociedad.


Ya no sueño con encontrar un compañero para mi camino... porque ya no sé cuál camino seguir, y si es que seguir. Quiero aprender de alguien, quiero volver a creer que existe algo fuera de la maldita rutina social. Quiero sacarme todos los miedos y arrancar.



Soy brutalmente imperfecta.
Soy... la más tímida de las valientes.
Soy sólo un escudo...  pues, no me considero dueña de las aptitudes necesarias para lograr ser la mejor, como siempre han querido que sea.


No tengo ganas de arreglarme, y hacerme ver  y sentir menos fea.
No fuí dotada de estética física y no quiero revertirlo.
No soy tan inteligente, perseverante, y tenaz como me creen.
Tengo muchos más temores, traumas, y trancas que ánimos de supervivencia y de resolución de problemas.
No tengo un norte creado por mis pasiones; he vivido siempre para conformar los ideales que me han impuesto. Para ser "el ejemplo" de hija, de prima, de amiga, de mujer.

Ejemplo que me cansó, que no anhelo, no me agrada, no me dignifica, no me apasiona... y me está matando.











                                          Dedicado a Jaime, por ser el protagonista de la conversación más enriquecedora que he tenido en años. Gracias.




Mariam.







.-

2 comentarios:

  1. no tienes idea de lo importante que eres en mi vida, no estoy deacuerdo en nada de lo que dices hoy y no creo que este mal, te dejo porque creo que las crisis son necesarias mas para personas como nosotras.

    pero tube miedo... y lo odie*
    no te vay... que me costaria volver a respirar
    yo juro no irme pa cuando no quieras repirar.

    trato?

    ResponderBorrar