sábado, 21 de agosto de 2010

No quise...e igual lo hice.

La añoranza por los tiempos ya idos no es lo más presente que tengo como nostalgia dual de estos mísceros días.

Es más bien un sentimiento de descontento... de desánimo, de confusión... Debería preocuparme más si no me preocupara, creo. Sería la demostración perfecta de que ya ninguna pasión me descontenta ni me eleva en gracias.

Creo que cuento con una mano, y me sobran dedos, a las personas que me han visto alguna vez triste o "sufrida" - como alguien me dijo por ahí...-

A esta altura todo me parece igual, todo me dá lo mismo; todos me parecen egoístas y despreocupados de su entorno. ¿Será, realmente, el maldito mundo así... o yo le estaré dando una connotación a medida de los ojos poco visionarios que tengo en este momento preciso de mi existir?.


¿Es tan válido sacarse la cresta para "sobrevivir" en una sociedad que no te hace feliz?.

¡Si tan sólo pudieras vivir, realmente, el Carpediem y pudiéramos dejarnos llevar únicamente por el fluir?. Fue lo que siempre admiré de Clementine. ¡Esa mujer si que sabía disfrutar el momento!.


Hoy, tengo dudas de hasta lo que es el amor. Yo ...juraba a mucha honra y con seguridad obstinada, que lo que había sentido por El Nico  era lejos lo más hermoso  e irrepetible en la vida. Viví, de hecho, aferrada casi dos años quizás a un amor pasado que no fue más que idealizar futuro juntos; futuros que no se cumplieron y que ninguno de los dos aún entiende como llegamos a este punto.


  Estoy segura que ninguno de los dos amará de nuevo así, él también lo cree... Y, me enorgullece decirlo.

El desamor es el mejor sentimiento para comprender el marchar del mundo y sus díscolos soles; ni siquiera desafío a que alguien pueda enamorarme... ya no. No creo que haya un hombre capaz de ilusionarme tanto, de "embobarme " tanto... para que yo me rinda a seguir amando al desamor mismo.  Soy una cabrona con mis emociones; lo admito.  Nadie me enamorará de nuevo; no existe aquel capaz.

Me pregunto si...¿ es más amor... el dar y recibir; o el sólo dar (como lo hago yo...)?.

¿Será "obsesión " pensar tanto en alguien... o realmente, es porque se encamina a un sentimiento más válido?

¿ Seguirá siendo un  juego... o se lo preguntará , en realidad, como me lo cuestiono  yo ?

Nunca había disfrutado tanto estando sola... ni me había hecho "más grande". Realmente, el poder incursionar en las mentes de otros mediante su derrame de letras sobre mis ojos ... es la maravilla misma del existir...en comunidad, al menos.  El momento único no es menos vano, que la vanalidad de una historia que lleva consigo la mochila de la costumbre.


Soy leal y amante necia de mis impulsos y emociones a flor de piel.


Si me licencia otra vez...no se salva.   Pero, si se demora mucho... inequívocamente, me aburriré de nuevo. Como me aburre todo... y peor aún; mi esencia categórica saldrá a flote hasta que huya, elimine, bloquee, y yo misma cabe la fosa fúnebre para su entierro.


¿Tú a qué hora piensas, si mantienes todo el día tu mente activa en complacer a los demás?


En la noche me despiertan todos los demonios de la imaginación; mientras que durante el día me dejo apaciguar por un cariño extraño, sobrehumano; torpe y esquizófrenico en su vía de ida y llegada.

- ¿Tú a qué horas  duermes ?
- Yo no duermo...




Mi admirado Albert decía que era una perdida de tiempo dormir. Yo igual lo creo. Para un arquitecto es una inexorable irresponsabilidad dormir.  ¿ Y para un ser humano existencialista y con alardes de 'artista' ?.

Encontré, o quiero creer que así fue, a un ser vivo que escucha mis miradas y siente, realmente, mis palabras. De hecho, es lo  único que puede y quiere sentir de mi. Me parece hasta lo más romántico vivido hasta mis días : alguien a quién le gustes por tus palabras casi  únicamente, y nada más...


El ego es la madre de todos los males, de todos los egoísmos; y , finalmente, no se cansan de demostrarme que no habrá ser humano que me pueda amar más que yo misma  ( todos los demás lo hacen...me desconcierta y no me agrada) .  Pues, bien... yo al menos; disfruto dando amor. Podría hacer sentir amado a cualquier especimen  en la Tierra; pero, mi obstinada manera de sobrellevar esta mediocre aventura... nuevamente, se empecinó en uno.


Y será que entra la nada y el infinito... ¿ no le gustará a algún hombre ser amado más por su esencia que por la fuerza de la costumbre?.


Hoy sueño mi muerte perfecta : ¡morir de risa y placer!.

Hoy tengo un amor perfecto : ese que sólo yo ... puedo querer. ¿Y cuando se acabe? ... yo no extrañaré nada, pues nada tengo... Sin embargo, ese alguien se quedará con la ausencia de mis ganas de hacerle inexorablemente feliz, de hacerle sentir cada día más  único y valioso...
Le faltará, quizás,  mi alegria única para él; ya no gozará del privilegio de sentir sólo él, que la mujer que nunca nadie ha visto rendirse y llorar (pues, siempre se demostró como la más erguida y reestructurante), se siente protegida y admirada única e intrañablemente por su persona...  (Espero que se dé cuenta, que aquellos privilegios son sólo para su goce... y  el de nadie más ; aunque lo dudo.).

Las oportunidades se dan una sola vez en la vida. Esa posibilidad de penal es efímera y meramente circunstancial; yo estoy atenta. Pero, el partido en algún momento... va a terminar. Como el perfume... la fragancia es exquisita como un Channel nº 5 ; es el más elegante y glamoroso quizás.   Marilyn Monroe confesó que se dormía tras oler sólo unas gotitas de éste (  tal como me duermo yo con algunas sensaciones... ); la mezcla perfecta entre químicos alheídos y la naturaleza misma.  ¡Casi una obra de arte!... y el aroma que , por lo demás, me recuerda a Mi Mami. Pero, se acaba...como todo en la vida.




Fugaz, intermitente...aniquilantemente placentero. "Ésto también pasará..." ( O eso espero...)






Rengo o no Rengo. ¡He ahí el dilema!.












































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